En la actualidad podemos afirmar que
existen cuatro de estilos de natación bien definidos en los que se compite
actualmente, pero para llegar a esto a lo largo de la historia ha habido una
evolución en busca de incrementar la velocidad de desplazamiento.
En este caso quería centrarme en un
aspecto comentado en clase, el estilo "doble over", de como se ha
llegado desde este estilo utilizado antiguamente y con el paso del tiempo ha
dejado paso a lo que en la actualidad es el estilo crol.
Ha habido
una evolución histórica desde ese rudimentario estilo hasta
llegar a la actual técnica del estilo crol:
El 11 de agosto de 1875, pocos días antes
que el Capitán de la Marina Mercante Británica Matthew Webb cruzara
por vez primera (por lo menos oficialmente) el Canal de la Mancha, otro
británico, John Trudgen, entraba en la historia en la natación. Había
llegado poco antes a Londres, proveniente, según unos de la Colonia del Cabo
(la actual Sudáfrica), según otros de Sudamérica (aunque sea más creíble lo
primero, puesto que la Colonia del Cabo pertenecía al Imperio Británico, mientras
Sudamérica no) y rápidamente se había introducido en el círculo competitivo de
la natación londinense.
Aquel día, el mencionado 11 de
agosto, Trudgen debutaba en competición en los “Lambeth Baths” contra
un nadador local, el cual le concedía un “handicap” (es decir, una cierta
ventaja, ya fuera en tiempo o en distancia, que se daba a un rival de menor
categoría) sobre una distancia de 160 yardas (unos 145 metros; 1 yarda = 0,91
cm.). Ante la sorpresa general, Trudgen no se dejó alcanzar, conservando
la ventaja que se le había concedido, y, por lo menos es de suponer,
embolsándose la cuota parte de las ganancias sobre las apuestas que se habían
cruzado por parte del público.
Al día siguiente, el cronista del
“Swimming Record” comentaba: “un sorprendente nadador tenia la ventaja del
“handicap” – nos referimos al Sr. Trudgen – con una forma muy particular de
nadar, como acostumbran a hacer los indios”, y al decir esto, el
comentarista Ray Watson quizás estaría pensando en el estilo que años
antes, aquel comentado enfrentamiento de los dos indios
con Kenworthy en 1844 (aunque algunos se basan en este comentario
para asegurar que Trudgen llegaba a Londres procedente de Sudamérica,
y no de Sudáfrica).
Al contrario del over, el estilo
demostrado por Trudgen (que rápidamente pasó a conocerse con el
nombre de quien lo había implantado, aunque algunos deformaron su nombre, y
también era conocido como “trudgeon”) no era un estilo
lateral. Trudgen nadaba con el cuerpo perfectamente aplanado sobre el
pecho, cabeza alta, poco o nada hundida (en ocasiones ni la boca llegaba al
nivel del agua, para no dificultar la respiración) y completamente fija al
frente, sin moverla hacia los lados.
Los brazos trabajaban, “grosso modo”,
como en el actual crol (aunque unos los pasaban por debajo del cuerpo, y otros
lo hacían más lateralmente) mientras las piernas actuaban ejecutando un golpe
de braza por cada movimiento de brazos. De todo ello resultaba un estilo con el
cual se avanzaba a saltos y que, a pesar de ser bastante más rápido que el
over, tenia algunos, y no precisamente pequeños, inconvenientes. Por un lado,
la posición alta de la cabeza era sumamente incómoda para mantenerla durante
mucho tiempo (nuestros lectores pueden probarla, si gustan); por otro, esta
posición alta de la cabeza dificultaba en parte el pasaje aéreo de los brazos,
y, en tercer lugar, el rápido ritmo del movimiento de piernas, acababa de
agotar al nadador, si ya no lo habían conseguido los dos primeros citados
inconvenientes.
Todo ello dio como resultado que este
nuevo estilo únicamente se empleara en distancias cortas, 50 yardas; para las
escapadas, o los “sprint” finales, o, también, en los encuentros de water-polo,
cuando era necesaria una punta de velocidad. De lo que acabamos de decir, se
puede deducir que el over continuó reinando en las pruebas superiores a las 100
yardas, y buena demostración de ello son los récords conseguidos en 1895 (es
decir, pasados 20 años de la implantación del trudgen) sobre los 220 yardas
(201,06 metros) cuando Nuttall, 2,37”0 en la categoría de profesionales, y
el mencionadoTyers, 2,41”0 en la de aficionados, consiguieron sendos récords
mundiales (no oficiales) de la distancia, nadando ambos en over.
Sin embargo, y como suele suceder en casi
todas las facetas del deporte, el estudio y el entrenamiento han sido,
son, y serán (esperemos) la gran panacea que todo lo cura, y también en este
caso actuaron como a tal. Como hemos dicho, el gran inconveniente del trudgen
era la posición alta de la cabeza, que terminaba agotando al nadador (algunos
de ellos habían llegado al punto de tener que sacarlos del agua, sangrando por
la nariz).
Del estudio y del entrenamiento, se sacó
la conclusión que el inconveniente podía obviarse colocando la cabeza en
prolongación del cuerpo con la cara sumergida en el agua, aprovechando el
momento en que el brazo efectuaba el recobro aéreo para levantarla y hacer la
inspiración. Después, a algún técnico o entrenador se le encendió la bombillita
de las ideas, descubriendo que en lugar de levantar la cabeza, también podría
girarla (tal y como se hace en el actual crol) movimiento que resultaba más
fácil y cómodo, por lo que rápidamente se adoptó.
Así, se podía respirar sobre cada
movimiento de brazos, y aunque ello tenía como efecto un ritmo más lento,
determinaba un estilo más eficaz y, sobretodo, que podía emplearse en
distancias bastante más largas.
Al mismo tiempo que tenía lugar este
desarrollo del trudgen, los australianos ponían a punto una nueva modalidad del
trudgen, de manera que fuera posible conseguir un ritmo más rápido de brazos,
obviando la coordinación con los movimientos de piernas. Nacía de esta manera
el “double over arm stroke” (brazada con pasaje de los dos brazos por encima
del agua) abreviado rápidamente, como podemos suponer, a “doble over”, que
algunos técnicos confundían equivocadamente con el trudgen puro, puesto que
solo tienen en común el movimiento de brazos.
Se trataba, esencialmente, y como bien
nos indica su nombre, de una doble brazada lateral con inspiración sobre el
pasaje aéreo de cada brazo, coordinado con un movimiento de piernas a medio
camino tanto de la braza del trudgen como del “tijeretazo” del over. En este
“doble over”, las piernas únicamente se separan a partir de la rodilla, para
cerrarse inmediatamente, en un movimiento muy rápido y cerrado. Si en el over
el “tijeretazo” se daba durante la tracción del brazo inferior, en el “doble
over” se da durante la tracción del brazo superior.
Pese a todo esto, la dureza del trudgen
continúa haciendo difícil su uso para distancias largas. El entrenamiento,
lógicamente, produce sus resultados, y así, en 1897, el británico John
Derbyshire supera el “récord mundial” de las 100 yardas (aquellos 1,01”2
conseguidos por Tyers en over, tres años antes) con unos 1,00”2 que
ya están a tocar de la “mágica” barrera del minuto. Al año siguiente, 1898,
durante los Campeonatos de Nueva Gales del Sur, en Australia, el
local Peter Murphy escribe una nueva página en el desarrollo de la
técnica del crol. Dejemos que sea la prensa de aquellos días la que nos informe
de lo que estaba pasando: “.....un hecho posiblemente inédito en un
campeonato mundial (¡¡) lo hemos visto en las 880 yardas. Esta forma tan
particular de nadar, que ya es ciertamente dura en distancias cortas, todavía
cuesta más verla en distancias superiores a las 220 yardas. No hay constancia
de que ningún otro nadador haya hecho lo que Peter Murphy se ha atrevido a
hacer en estas 880 yardas.....”.
Hay que advertir que Murphy ni
siquiera llegó a ganar aquellas 880 yardas, aunque el hecho de haberlas nadado
enteramente en la modalidad de “doble over” ya había despertado el interés de
técnicos y aficionados. Dos años después, 1899, otro australiano, un mito de la
natación mundial, Frederick Lane, ganaba la prueba de la milla, 1609
metros; de aquellos mismos Campeonatos de Nueva Gales del Sur, empleando el
“doble over”, demostrando con ello que este “doble over” podía ya servir para nadar
cualquier distancia. Al año siguiente el mismo Lane se proclamaba
campeón olímpico de los 200m.libres en los JJ.OO. de París-1900, con un tiempo
de 2,34”2. Según parece, por los comentarios técnicos de que disponemos, Lane
empleaba tanto el trudgen como el doble over, según las conveniencias del
momento.
Pese a estos éxitos, continuaban
lloviendo las críticas sobre estas modalidades, con especial énfasis sobre el
trudgen. Tanto es así que las críticas llegaban incluso a los periódicos
especializados. Tenemos un ejemplo de ello en el “Sydney Referee” del 11 de
julio de 1900, donde se puede leer este comentario: “.....tanto es así que
los mejores nadadores solo emplean este estilo (el trudgen) en
competiciones de hasta 100 o 200 yardas. El único que acostumbra a emplearlo en
cualquier distancia es Fred Lane. La demostración de que es un estilo duro
lo tenemos en que el nadador llega siempre tan exhausto a la meta, que tienen
que ayudarlo a salir del agua, en ocasiones sangrando por la nariz, y en otras quedando
postrado durante varias horas después de la competición; (y ahora la
severa advertencia del cronista) ¡emplead solo este estilo en
distancias cortas!.
El reinado de ambas modalidades, trudgen
y doble over, fue, sin embargo, efímero, tal era la rapidez del desarrollo de
la natación en aquel tiempo. Si en 1894 Tyers había conseguido 1,01”2
nadando en over, y solo tres años después, Derbyshire batía este
tiempo nadando en trudgen, no iban a pasar más de seis años para que un australiano, Richard
“Dick” Cavill superara los 1,00”2 de Derbyshire, nadando en 58”8.
y Cavill era ya un nadador de crol.